Jaime es un chico tímido que trabaja como contable en la misma compañía ferroviaria de León en la que trabajó su padre. Pasa sus días soñando con una vida diferente. Se refugia en la lectura de novelas del oeste y admira a su tío Boni que trabajó como extra en algunos spaghetti westerns. La llegada de un nuevo jefe coincide con varios desastres en una línea de ferrocarril deficitaria y su imaginación le permitirá descubrir y alcanzar sus sueños.