Raquel Condado y José Luis Ramos son una pareja de ceramistas que llevan toda una vida dedicada a convertir un simple trozo de arcilla en una obra única, personal y de extraordinaria belleza. Sus herramientas de trabajo son el torno, sus propias manos y una combinación calculada de los cuatro elementos de la naturaleza: agua, tierra, aire y fuego. Mientras el plato del torno gira se acerca de manera indiscreta a su actividad diaria, convirtiendo la tierra en arte, sueño y magia.