Finales del Siglo XV. El navegante genovés Cristóbal Colón sueña con encontrar una ruta marítima nueva que permita llegar directamente a los mercados de Asia. Tras lograr la aprobación del proyecto por parte de la Reina Isabel de Castilla, zarpa desde el Puerto de Palos el 3 de agosto de 1492, ignorando que entre Europa y Asia se interponían un continente (América) y un océano (el Pacífico) que no figuraban en los mapas.